Catedral de Oslo
Un lugar que los turistas deben visitar, sin importar las creencias o religión.
Siempre he tenido curiosidad por conocer el interior de las catedrales o iglesias, creo que es un lugar en el que se pueden observar diferentes expresiones artísticas, además de conocer un poco más de la arquitectura de las iglesias en Europa. Desde un punto de vista religioso este templo, un lugar para tomar una pausa, respirar y pensar en las cosas que estamos viviendo en ese momento de nuestras vidas.
Es por esto que desde que me mudé a Oslo, quise venir a conocerla para descubrir un poco más de la historia de la ciudad y terminé encontrando mucho más que eso; un lugar en el que pude sentirme en paz, tranquila, un refugio del caos de la nueva vida a la que había llegado. La Catedral de Oslo, la tercera catedral de la ciudad, es una joya histórica rodeada de comercio y edificios modernos, fue terminada en 1697 y hace parte de la iglesia protestante, evangélica luterana de Noruega. Anteriormente era conocida como La Iglesia de Nuestro Salvador.
La primera vez que fui, fue un completo accidente, estaba caminando por la calle de Karl Johan, tratando de aventurarme en conocer el centro de la ciudad y justo antes de ir a la parada del tranvía, vi de lejos la catedral, y algo me dijo que era momento de conocerla. Estando a unos metros se sentía la grandeza de la catedral, y justo en frente de la entrada, contemple las puertas, me llamaron mucho la atención. Cuando las detallé, vi que estaban labradas con escenas que parecían religiosas; fue ahí donde decidí entrar y conocer un poco más de la historia de este lugar.
Cuando entre había un libro que contaba la historia de la catedral, estaba en noruego así que mi fiel amigo “Google Traductor” me ayudo a traducir cada una de las páginas, un momento un poco extraño para las personas que pasaban a mi lado, porque durante varios minutos, estuve tomando fotos a este libro para poder descifrar que era lo que había en las puertas.
Finalmente logré ver una sección donde decía que las puertas son la ilustración de las bienaventuranzas que están escritas en la biblia, personas que para mi total asombro, no estaban haciendo nada heroico o majestuoso, sino por el contrario, reflejaban la vida cotidiana, una forma que encontraron para que el pueblo se sintiera más familiarizado y aceptara el llamado a la iglesia.
Todo esto había sucedido sin yo haber entrado, porque luego había otra puerta hecha de vidrio y madera, un diseño más familiar para mí. Entré y de inmediato percibí un aroma muy fuerte a madera, se podía sentir que este sitio hacía parte de la historia viva de la ciudad; lo digo porque es algo muy característico de las casas o lugares antiguos que he visitado aquí en la ciudad. La energía que sentí, hizo que mi actitud cambiara por completo, es algo intimidante porque se debe hacer silencio, pero al mismo tiempo agradable porque se siente serenidad a tu alrededor.
Una vez entré, observé una repisa con muchos libros, era del nuevo testamento que en noruego se escribe “Norsk salmebok”, los de color rojo están en letra normal y los de color azul con letra más grande, también había cojines, algo que jamás había visto esto en una iglesia, supongo que son para estar más cómodos, así que preferí seguir derecho y sentarme en una silla.
Sin duda y lo más asombroso es todo el arte que está en el techo, me pareció muy interesante ver que la pintura mostraba diferentes escenas religiosas y que eran ilustraciones muy diferentes a lo que he visto en las iglesias católicas tradicionales, además en el centro se observa un sol muy brillante que tiene una inscripción “Gloria in excelsis Deo” que significa “Gloria a Dios en las Alturas”. Según la descripción de esta pintura, el sol es una forma de mostrar una relación directa del creador con todo lo que hay en el Universo. Este concepto me dejo fascinada; otra cosa que me dejo perpleja es que esta gran obra de arte fue hecha por un artista Noruego llamado Hugo Lous Mohohr hace menos de 100 años, porque fue terminada en 1950.
Ahí me quedé contemplando la pintura y entendiendo cada detalle, luego de un rato, comencé a caminar hacia el costado derecho y encontré una puerta, cerrada para el público solo con acceso autorizado, según el libro de la entrada, el que me contó sobre la puerta, pude también conocer que el sótano tiene una cripta funeraria, definitivamente este sitio más que una catedral, es un lugar lleno de historia y de cosas alucinantes que jamás pensé en conocer; la cripta se construyó pensado para 42 tumbas individuales y 4 dobles, sin embargo estos números se duplicaron, ya que era un lugar muy solicitado. Se dice que en los países nórdicos, la gente pensaba que el infierno estaba hacia el norte, por esta razón las mejores tumbas se encontraban hacia el sur y tenían un precio más alto. La primera persona enterrada en la cripta fue el vicegobernador Just Hoeg en 1694, quien fue un gran promotor en la construcción de la catedral, así que en agradecimiento le otorgaron el mejor lugar de entierro en el costado sur.
Camine por todo el interior, tome fotos al techo, al órgano, al pulpito, al altar y todo lo que había a su alrededor. Luego, leyendo un poco más sobre la historia, vi que cuando la construcción terminó en 1697, los ciudadanos no estaban a gusto con su diseño, decían que la torre era demasiado baja y no era digna de una catedral, esto es algo muy interesante porque aún hoy, la torre de la catedral es el punto más alto de los edificios en esa área, así que decidí detallarla por fuera, camine alrededor y cruce la calle para tener un mejor ángulo y claramente se puede observar una parte que se añadió a la torre del reloj por la diferencia del color del ladrillo, fue una adición que se hizo después de 150 años.
Como llegar
•Si estas en el centro, caminas sobre la calle de Karl Johan y diagonal al H&M está la catedral.
•Si estas en la estación central, desde ahí se puede ver la catedral, cruzas la vía del tranvía y son 5 minutos caminando.